Cuando se ve que el caso de la colusión de las farmacias termina en la más absoluta impunidad de los capitalistas involucrados (1), da indignación ver como en este país si tienes dinero, si tienes plata puedes hacer lo que quieras. Más que en una dominación de Élite, como tradicionalmente fue, ahora también hay aspectos de plutocracia: si tienes plata suficiente, puedes pasar incluso por encima de la ley, como también el caso de Arturo Vidal lo demuestra.
Y después los apologistas del sistema rasgan vestiduras por la violencia de una parte de la juventud.
Qué asco este país.
(1)
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